['KarlTelera' En Verso]



 
Lo tenía francamente difícil, la verdad. Pero lo cierto es que David Benedicte (Madrid, 1969) vuelve a sorprendernos, y de qué manera, con su tercer poemario. El primero, Biblia ilustrada para becarios (20099), estaba centrado en el mundo del trabajo y del negocio y sus compañero inseparables, el desempleo y la precariedad laboral, mientras que Maremágnum 44 (2011) tenía que ver más bien con el ocio y las vacaciones de verano, siempre desde un enfoque muy crítico y comprometido.
Poemarx viene a culminar un proceso. En sus poemas, el gran icono ideológico de la izquierda, Karl Marx, se traviste, subvierte y metamorfosea en el León de la Metro y en el quinto de los Hermanos Marx, a los que se rinde un encendido homenaje -especialmente a Harpo, el más elocuente de todos, a pesar de no poder hablar-, así como a algunos grandes cómicos del cine mudo norteamericano, a Buñuel, a Umbral...
Estamos ante una obra conceptualmente unitaria que tiene como principal referente el cine: de hecho, las películas aludidas se hacen explícitas en una lista final denominada 'KarlTelera'. A lo largo de la misma, se alternan, eso sí, los largos poemas narrativo-discursivos con poemas aforísticos-greguerísticos muy breves (la mayoría, de un solo verso) y otros de carácter visual, de los que se desprenden agudas reflexiones sobre las contradicciones y perplejidades de nuestro tiempo. Desde el punto de vista expresivo, lo más destacado es su tono irreverente y su espíritu iconoclasta y transgresor, marcado, sobre todo, por el hábil empleo del humor y la ironía y la experimentación verbal y tipográfica. En cuanto a su lenguaje, llaman la atención, ya desde el título, los neologismos y los ingeniosos juegos de palabras. Este excelente libro supone la consagración de un poeta.
 
LUIS GARCÍA JAMBRINA
ABC CULTURAL
27/ABRIL/2013